Limpieza Facial - Casera y Profesional

Seguro te ha cruzado por la mente que, para tener una piel saludable, debes de invertir en cremas caras y en los productos ideales para tu tipo de piel. Sin embargo, de nada serviría que apliques los mejores productos del mundo sin antes haberte realizado una buena limpieza facial. Este primer paso es el más importante en tu rutina de cuidados. Te platicamos cómo y con qué hacerlo en casa y cuándo es momento de acudir con un profesional por una limpieza profunda.

Limpieza facial

2 veces al día. No, no es una sugerencia, la limpieza facial así se debe de hacer; por las mañanas y por las noches... te explicamos por qué y cómo:

A lo largo de tu día, tu piel funciona como barrera protectora frente a los agentes externos; bacterias, virus, sustancias químicas y además es tu principal regulador de temperatura. Esta acción deja contaminantes y suciedad en la dermis, que ayudan a la formación de radicales libres (Tipo de molécula inestable que se elabora durante el metabolismo normal de las células y que ataca al colágeno y la elastina en la dermis, dando paso al envejecimiento prematuro). Esta acción hace que en la piel se depositen todos estos agentes externos. Pero, además, internamente tu cuerpo genera otras toxinas que expulsa por la piel (como exceso de grasa que genera sebo, sudor, células muertas). Esto ocasiona que los poros se obstruyan, por lo que la piel no puede “respirar” correctamente, dando como resultado una piel deshidratada y envejecida. Además, en un rostro sucio, los tratamientos humectantes y nutritivos bajan su efectividad hasta en un 50%. Por ello es de suma importancia la limpieza en la noche, para eliminar todos esos bloqueos y suciedad de tu rostro, permitiendo a tu piel renovarse correctamente y mantenerse más sana y joven. Si tienes piel mixta a grasa, es muy importante para retirar el exceso de sebo.

Durante la noche tu piel aprovecha el ciclo de sueño para reparar los daños de los radicales libres en las células, así como reconstruir sus defensas. Ese momento es crucial para tu piel, sin esa reparación y descanso, el envejecimiento y signos de cansancio serían inevitables, como resultado tendrías arrugas como del doble de tu edad.

Por las mañanas la limpieza facial debe ser más gentil que por las noches, pues no queremos eliminar del todo los lípidos naturales que tu piel requiere, además que al eliminarlos, la piel solamente producirá más para contrarrestar la sequedad que la falta de ellos pueda ocasionar. Sin embargo, como ya lo comentamos, durante la noche tu piel se renueva, esto quiere decir que habrá células muertas que hay que retirar. Lo recomendable es limpiar con agua micelar en un algodón sin frotar demasiado, seguido por tu rutina de productos.

Por ello debes limpiar tu rostro 2 veces al día (mañana y noche), pero esto no es todo. Muchas personas lavan su rostro con el mismo jabón o producto con el que limpian el cuerpo. O incluso usan jabones faciales que no son los indicados para su tipo de piel. Y es que existen muchos tipos de limpiadores faciales, cada uno es ideal para un tipo de piel, pero no te agobies, te hablaremos de cada uno de ellos.

Pero primero… ¿Qué es un limpiador facial?

Un limpiador debe eliminar la suciedad de nuestra piel mediante activos que absorban y atraigan la polución, grasa, bacterias y virus que se encuentran en el medioambiente. Todo ello sin desequilibrar el pH de nuestra piel.

La elección de nuestro protocolo de limpieza, no solo dependerá de nuestro tipo de piel, hábitos y necesidades, sino también de nuestros gustos. El ritual de higiene facial es lo más importante en la rutina de belleza, supone un 50% de nuestro tratamiento, no en cantidad de producto, ni gasto económico (de hecho, es lo más barato), sino en los resultados que vayamos a obtener en nuestro tratamiento.

Aplicarnos un producto u otro va a determinar, la oxigenación de nuestra piel, la luminosidad, la batería existente, la calidad de nuestro manto hidrolipídico, así como la profundidad hasta la que llegarán los activos que apliquemos a continuación.

Por lo tanto, cuando notemos que nuestra piel está fatigada, apagada o deshidratada, lo primero que debemos revisar será nuestro limpiador facial.

tipos de limpiadores faciales

Tipos de Limpiadores Faciales

Agua Micelar

Desmaquilla, limpia y tonifica. La mejor opción si tienes poco tiempo por su fácil y rápido uso. El agua micelar está compuesta por micelas, que, para explicarlo de forma sencilla, es hablar de agentes limpiadores que son solubles en agua. Y, al mismo tiempo tienen la capacidad de atrapar la materia grasa que es incompatible con la misma, lo que la hace una fórmula perfecta para remover residuos de suciedad, impurezas y maquillaje, adaptándose a todo tipo de piel. La desventaja es que no siempre es funcional con maquillaje waterproof.

 

Tónico

Éste debe aplicarse tras el agua micelar o desmaquillante. Su función principal consiste en equilibrar el PH de la piel, que se desequilibra después de desmaquillarnos. Pero hay más, porque también cierra los poros, refresca, elimina los restos de desmaquillador y prepara el cutis para los cuidados posteriores. Con sólo mojar un algodón y pasarlo suavemente por rostro, cuello y escote, tu piel estará lista para el siguiente paso.

 

Leche Limpiadora

Si buscas una limpieza profunda, la leche limpiadora es una de las mejores opciones. Es un cosmético en forma lechosa que podría usarse para todo tipo de pieles incluyendo las sensibles por su suave textura. Aplícala con un algodón por todo el rostro mediante movimientos de alisado, hasta eliminar todo el maquillaje y/o suciedad. Lo mejor es usarla en cutis secos y retirar bien el producto, ya que, si no puede dar una sensación grasienta.

 

Aceites

Si eres de las que suele maquillar los ojos y labios a menudo, el aceite es tu mejor aliado. Este producto solo debe usarse en esas áreas, ya que es demasiado grasiento. La ventaja es que es capaz de eliminar el maquillaje waterproof sin problemas. Ideal para pieles secas o deshidratadas, ojo si tienes piel mixta a grasa, busca un limpiador hidrófilo (soluble en agua) para evitar exceso de aceite en tu piel.

 

Gel

Este producto es uno de los clásicos en la limpieza del rostro. Sus activos limpiadores acaban con la suciedad, además de controlar la producción de sebo. Aunque va genial en todos los tipos de pieles, su uso está recomendado en rostros mixtos o grasos con tendencia acnéica. Son texturas geloides, sin grasas, que arrastran en profundidad, tanto la grasa como la suciedad, formando una espuma suave con tensioactivos que consiguen eliminar todos los restos.

 

Espuma limpiadora

Son de texturas y aromas exquisitos por lo que son un maravilloso ritual que suele enamorar a todas las personas que las usan. Su composición varía en gran medida dependiendo del tipo de espuma, marca, etc. Por lo general son muy similares a los geles, contienen tensioactivos y otros limpiadores que consiguen una limpieza máxima en todo tipo de pieles, pero deshidratan a las pieles más maduras o secas.

 

Jabones

El preferido de los jóvenes y hombres. Son fáciles de usar, cómodos y no ocupan nada. No eliminan maquillaje, pero consiguen una limpieza excelente. Normalmente contiene tensioactivos por lo que en pieles secas o sensibles no muy recomendado.

 

Bálsamo limpiador

Los bálsamos limpiadores son, probablemente, el tipo de limpiador facial más desconocido. Se trata de un producto en forma de pasta, cuya composición está basada en un aceite. Sirven para eliminar el maquillaje y la grasa del rostro, siempre y cuando la piel sobre la que se aplica no sea excesivamente grasa, es decir, que solo se recomienda en pieles secas, mixtas o maduras, ya que van a proporcionar un grado de hidratación muy elevado.

 

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Y... ¿Cómo debo limpiar mi rostro?

Primero, desmaquilla

Para quienes usan maquillaje, lo primero que hay que hacer es desmaquillar ojos y labios con un producto específico para esa zona, posteriormente el desmaquillante de tu preferencia para el resto del rostro, como un agua micelar, por ejemplo. Impregna el algodón, extiéndelo por el rostro y seca después con un pañuelo facial o deja secar al aire. Después, el tónico es imprescindible, ya que equilibra y prepara para la posterior absorción de nutrientes.

Ahora, lavemos

Para lavarte de forma efectiva utiliza agua tibia para abrir los poros. Evita usar agua demasiado caliente o fría, ya que podría irritar la piel. Enseguida aplica un limpiador con movimientos circulares, siempre hay que hacerlo de dentro hacia fuera y en sentido ascendente para fomentar la firmeza del rostro. Enjuágate, asegurándote de eliminar el limpiador completamente. Puedes enjuagarte una segunda vez para eliminar por completo cualquier rastro de impurezas. Después de enjuagarte, sécate con ligeras palmaditas, sin frotar con la toalla. De esta forma evitarás maltratar la piel delicada de tu rostro y tu piel se encontrará lista para el siguiente paso: hidratar.

Limpieza Profunda profesional

Mantener la piel limpia a diario es sumamente importante y conveniente, desafortunadamente no siempre es suficiente. Actualmente existen procedimientos de limpieza profunda realizados por profesionales de la piel que ayudan a eliminar a profundidad y por medio de herramientas y aparatos especiales que ayuden a liberar y limpiar los poros de puntos negros o bacterias causantes del acné. Además, suelen aplicar sustancias que generan un peeling superficial (o profundo según sea la necesidad de cada paciente) para renovar capas de la piel. Estos procesos son delicados, si intentamos apretar un granito nosotros, podríamos ocasionar una herida mayor y marca posterior, si lo dejamos en manos expertas tendremos un cutis cuidado y saludable.

¿Cada cuánto se debe realizar una limpieza profunda profesional?

Si bien estas limpiezas se suelen recomendar cada mes a dos meses, el tiempo ideal siempre será variable con cada persona. Más que nada, depende de tu estilo de vida y tus hábitos. Si tu estilo de vida hace que la exposición a suciedad y polución sea mayor, la limpieza profesional se recomendaría más frecuentemente.

Tipos de limpiezas profundas profesionales

En Clínicas Dermédica podrás realizarte limpiezas profundas en manos de profesionales de la piel. Para ello tenemos distintos tipos:

 

Skin Scrubber

Skin Scrubber – un equipo especialmente diseñado para satisfacer 2 necesidades básicas de la piel: Exfoliar las células muertas del rostro y acelerar la absorción de sueros o producto nutritivos en la piel por medio de una espátula ultrasónica. Utiliza oscilaciones de alta frecuencia generadas por la tecnología ultrasónica de 24,000 Hz por segundo para penetrar profundamente en la piel, eliminar las células muertas de la superficie de la piel y promover la regeneración de colágeno y elastina.

 

Microdermoabrasión

Microdermoabrasión – es un tratamiento que a través de agua y pulido con puntas de diamante realiza una limpieza profunda de la piel, eliminando las células muertas superficiales, grasa y puntos negros acumulados, disminuye el tamaño de los poros, mejora la textura áspera del rostro y atenúa cicatrices, logrando así una piel uniforme y suave.

 

Hydrafacial

Hydrafacial™ - El tratamiento es una combinación de limpieza, exfoliación, extracción, hidratación y protección antioxidante. Se aplica en rostro, usando sustancias como: Ácido hialurónico, Glucosamina, ácido salicílico natural, vitaminas A y E y extracto de miel. El tratamiento se adiciona con una terapia de luz led para finalizar, que ayuda a activar el colágeno y a tratar poros dilatados.

 

Peeling Químico

Peeling Químico - se coloca un producto químico abrasivo sobre la piel para que esta caiga y dé paso a otra piel nueva sin marcas ni lesiones. Dependiendo de la necesidad del paciente se aplicará el producto y su profundidad de acción. Ayuda a disminuir líneas finas y cicatrices.

 

Beneficios de la Limpieza Facial

  • Permite la oxigenación del cutis.
  • Los productos cosméticos tienen mayor efectividad.
  • Retrasa la aparición de arrugas.
  • La piel está más luminosa.
  • Ayuda a disminuir la apariencia de estar cansado.
  • Elimina el acné y los puntos negros.
  • La piel luce mucho más tersa, suave y atractiva.

Si deseamos obtener todos estos beneficios para la limpieza de nuestro rostro y disfrutar de una piel mucho más bonita y saludable, tenemos que adquirir unos hábitos que, sí o sí, todos los días tenemos que realizar.

Con el tiempo, nos daremos cuenta de que esto nos ayuda a prevenir el envejecimiento de la piel, a atenuar las arrugas y a permitir que el cutis se vea más rejuvenecido.

Recuerda que en Farmacia Dermédica puedes adquirir el dermolimpiador más adecuado para ti y en Clínicas Dermédica puedes agendar tu cita de Limpieza Profunda en manos de profesionales con más de 20 años de experiencia.

#TeamPielSana

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